Anestesia General
Uno de los elementos más complejos de cualquier cirugía es el manejo anestésico. Hay pacientes que despiertan sin problemas o presentan leves síntomas, hay otras que se complican y van a la UCI, y las de peor suerte simplemente nunca despiertan.
En algún momento despertaremos, no podemos vivir toda la vida anestesiados. El problema es que nuestros hijos nos van a pasar la cuenta y les aseguro nos van a preguntar ¿por qué si había tanta evidencia, e información no hicieron nada?. Me imagino que les voy a responder que hice mi parte, que muchos hicimos nuestra parte, pero éramos una tremenda minoría. Les voy a contar que casi todos vivían anestesiados y encapsulados en su propio mundo. Les voy a contar que pese a lo globalizado que éramos, todos sentíamos los problemas al medio ambiente como ajenos.
Va a ser triste, pero voy a tener que decirle que lamentablemente gran parte de los padres de sus amigos cuando pudo hacer algo no lo hizo. Y voy a ser preciso en aclararle que no se trataba de salir a tirar piedras, sino que sólo de informase y darse cuenta del saqueo ambiental del cual estábamos siendo víctimas.
La evidencia es tanta, incluso ya se está haciendo visible en los supermercados, ¿ha visto jurel en el último tiempo?. El panorama es tan macabro que probablemente no conozcan algunos países que hoy existen. Haití puede ser uno de esos casos, un país que durante estos días entrego cifras que en verdad cuesta un poco dimensionar “800.000 enfermos de cólera”. Poco puede hacer Haití para salir de la pobreza extrema en la cual esta sumida, lo que hace años fue parte importante de su economía hoy no existe, gran parte de sus tierras cultivables hoy esta perdida, se sobre explotó.
Ellos verán la evidencia pero ya será muy tarde. Verán como en el 2000 el 80% de los recursos sólo era para abastecer a un 20% de los hombres sobre la tierra. Se van a espantar cuando sepan que millones se enferman por consumir agua insalubre. Y que decir de cuando sepan que en pleno siglo 21 aún había gente que moría de hambre. Para nosotros fue habitual el concepto de “refugiado político”, para ellos será más común escuchar “refugiado climático”
¿Que le diré cuando me vaya a recorrer la Carretera Austral con ellos?. Se me ocurre algo como “Aquí había un Río, se llamaba Baker, tenia un agua turquesa maravillosa y era el más caudaloso de Chile, cuando lleguemos a Santiago les muestro las fotos”. Y así con todos los lugares que hoy están siendo arrasados por las termoeléctricas.
Lo único que me tranquiliza es que aun no estamos muertos, sólo anestesiados, y a diario son miles los que están saliendo de ese estado, anestesia general.