Mi padre y mi hija
Hija, soy lo que soy porque tú existes. Hoy me regalaste porque tú me transformaste. A mi vida, que ya era de colores, un nuevo sentido le diste.
Y tu papá, con la llegada de mi hija, tu nieta, sólo confirmaste que si se es buen padre se es un buen abuelo. Agradezco tu presencia en mi vida y en la de ella, trascendiste en nosotros y eso debes saberlo. Vivo mi paternidad consciente del paternaje que recibí, y créeme que eres un gran ejemplo de presencia y entrega de amor. Tu hijo y tu nieta te lo agradecerán hasta el final de los días.
Pienso en la palabra trascendencia, miro a mi hija, y es imposible hacerlo sin mirar hacia atrás. Gracias universo, gracias papá, gracias hija!!