Conversaciones sobre promoción de lactancia materna y crianza respetuosa
Durante esta semana el sistema de protección a la primera infancia “Chile Crece Contigo” (ChCC) organizó un ciclo de “Conversaciones sobre promoción de Lactancia Materna y Crianza Respetuosa”. Y la columna que escribo a continuación utiliza datos y se enfoca en temas presentados en estos dos días.
El “Chile Crece Contigo” es un Sistema de Protección Integral a la Infancia creado en 2006 y puesto en marcha en 2007 dirigido a todos los niños y niñas del país, de forma de acompañarlos y apoyarlos en su desarrollo, desde la gestación hasta que ingresen a prekinder en el sistema escolar. Todo lo anterior con el arguemento entregado por la biología y las ciencias cognitivas que este es el periodo más significativo en la formación del individuo. En la propia página web del sistema señalan que “En la medida en que el acceso de los seres humanos a los recursos requeridos para un adecuado desarrollo desde etapas tempranas de vida está diferenciado por elementos socioeconómicos, la reproducción intergeneracional de la desigualdad de oportunidades se mantendrá”.
Un 81,6% de los niños Chilenos se atiende en el sistema publico de salud, y es a ellos a quienes esta dirigido el ChCC. Del total de niños, actualmente 45 mil viven en extrema pobreza, en el 51% de los hogares que viven estos niños la jefatura del hogar recae en una mujer. En un comienzo el principal énfasis del programa fue puesto en humanizar el proceso de gestación y nacimiento, y si bien hemos sido testigos de grandes avances, la brecha aún no es menor. Para los interesados en ese tema hay un documento que fue desarrollado por la antropóloga Michel Sadler que recoge las experiencias exitosas de parto personalizado de Chile.
Sin embargo en esta oportunidad el tema central no era gestación ni parto, sino crianza y lactancia, y el invitado internacional a estos conversatorios fue el pediatra español Carlos González, uno de los máximos exponentes de la crianza respetuosa quién comenzó su presentación siendo muy claro “La actual generación de niños es la que menos tiempo pasa con sus padres durante los primeros 5 años… nuestros niños nos quieren tanto que deberíamos hacer más cosas para merecer su cariño”. El Dr. González señaló que la resiliencia se desarrolla en los primer de vida, siempre cuando se trate al niño con cariño, al menos una persona.
Luego vino el turno del psicólogo, experto en desarrollo del niño, Felipe Lecannelier quién en su exposición llena de evidencia cuestionó al sistema económico y lo responsabilizó de la actual forma en que los padres crían a sus hijos. Según resultados de un estudio Chileno, que fueron respaldados por datos similares de un estudio norteamericano, la madre pasa sólo 15 minutos a la semana cara a cara con su hijo compartiendo tiempo de calidad, sin estar viendo tele, sin mirar el celular y sin otras distracciones, el padre sólo 12. Fue enfático en señalar que la crianza basada en la disciplina requiere menos tiempo a corto plazo, pero tiene efectos negativos a largo plazo, y aclaró que los niños aprenden de los padres, no lo que dicen, sino la coherencia de lo que hacen y expresan/reaccionan a nivel emocional, por lo tanto pedirle a gritos a un niño que deje de gritar es un sinsentido.
Durante la jornada de la tarde el psicólogo Francisco Aguayo, dedicado al estudio de las masculinidades, habló sobre la participación del hombre en la crianza y como este se involucra en las atenciones de salud, además adelanto datos sobre un estudio cuyos resultados verán la luz en un par de semanas, y en el que tuve el honor de participar. Los datos que mostró Aguayo son enfáticos en señalar que el machismo de los propios profesionales sanitarios tiene un impacto negativo en la participación del padre de la salud sexual y reproductiva y de sus hijos, y además recalcó la importancia de comenzar a registrar la participación delpadre en los controles de salud, ya que hay una gran falencia en este punto.
En el segundo día de jornada nuevamente el Dr. González fue el primero en exponer y al igual que Michel Odent cuestionó el uso excesivo de la oxitocina en las unidades de preparto, señalando como argumento el desconocimiento que existe del impacto que tiene suplementar de manera rutinaria y en tan altas cantidades una hormona que la misma mujer puede producir, y que tiene un rol clave en las relaciones sociales, no por nada es conocida como la “hormona del amor”. Además señaló que en países como Suecia, luego del parto, el recién nacido no es separado de su madre sino hasta luego de 2 horas, acá en Chile la propuesta del ChCC, y utilizada como indicador de calidad, es dejar en contacto piel con piel al menos durante los primeros 30 minutos, pero aún en muchos hospitales lograr esto es una batalla diaria entre quién atiende el parto y la unidad de neonatología. La separación inmediata madre-hijo en el momento del parto tiene un impacto negativo en la lactancia. El Dr. González cerró diciendo, y lo destaco a propósito de una columna que escribí hace poco acá, que los pediatras están tan acostumbrados a indicar mamadera (alimentación complementaria) que cuando es realmente necesario ya no se les cree, “es como el cuento del lobo” señaló. La idea anterior fue reforzada luego por la pediatra Verónica Valdés, académica de la UC y consultora en lactancia de la UNICEF quién critico a la actual formación de médicos y pediatras señalando que “La malla curricular de los médicos no tiene incorporada a la Lactancia como tema” y agregó “Los médicos no tienen clases teóricas sobre lactancia, pero si de cómo preparar mamaderas”.
Cerró el encuentro el Dr. Francisco Moraga, presidente de la Sociedad Chilena de Pediatría (SOCHIPE) quién mostró un dato que me parece dramático: en Chile un 20% de los niños nunca toma pecho, y repitió algo que muchos sabemos, pero que no tenemos que cansarnos de reforzar, “El riesgo de morir entre los niños es inversamente proporcional al tiempo de lactancia… la lactancia otorga protección no solo en el corto plazo, sino que tiene impacto en términos del metabolismo a lo largo de la vida”.
Hay algo que todos sabemos y es el hecho de que las prácticas actuales hay que cambiarlas y derribar los paradigmas que están enquistados en el actual sistema. La respuesta que tenemos que ayudar a construir es que vamos a poner cada uno de nosotros para lograrlo, la evidencia esta a la mano del que quiera leerla, sólo falta voluntad. Por el momento, me parece un avance seguir aportando en plantear que la gestación consciente, el parto respetado y la crianza respetuosa son temas realmente relevantes si queremos cambiar la sociedad actual.
Publicado originalmente en Matasanos